El presidente de SOS Desaparecidos pide a Mazón que dimita y declare voluntariamente ante la jueza de Catarroja
El presidente valenciano se ha reunido con la primera asociación de víctimas cinco meses después de la dana

Cinco meses después de la mayor tragedia natural que ha asolado Valencia, la dana que dejó 227 muertos, el president de la Generalitat, Carlos Mazón, ha mantenido esta tarde la primera reunión oficial con una entidad de víctimas. Joaquín Amills, presidente de Sos desaparecidos, la asociación que representa a más muertos por la dana —reúne a 170 parientes de 70 fallecidos— le ha trasladado, según ha manifestado a la salida de un encuentro que ha durado cerca de dos horas, “todo el dolor de las familias, el deseo de que asuma lo sucedido y pida perdón”, que dimita como presidente y declare voluntariamente ante la jueza de Catarroja, que investiga la gestión de la dana.
“Creo que hemos sabido transmitir el dolor de cada familiar, su rabia, y entendiendo que habrá que depurar todas las responsabilidades para saber qué sucedió ese día 29″, ha manifestado Amills. “Queríamos testimoniar lo que las familias están pasando, testimoniar que para nosotros se falló el antes, durante y se falló después”, ha añadido para censurar a continuación la guerra política creada en torno a la tragedia.
“Le hemos dicho que el máximo responsable, lógicamente es el presidente de la Generalitat y que habrá que depurar responsabilidades en todos los sitios que sea necesario, incluido el Gobierno español, como hemos dicho muchas veces”, ha explicitado el presidente de Sos. Según Amills, Mazón les ha ofrecido facilitar el teléfono de una persona que no es de su equipo de gobierno para la atención a las familias. “Creo que es una puerta que se abre y que tendremos que saber aprovecharla”, ha defendido.
El presidente de Sos ha lamentado que otras administraciones no se hayan dirigido a las víctimas para conocer lo que piensan y lo que opinan los afectados y ha reconocido que ante su petición de dimisión, Mazón no ha respondido nada.
“Falló el antes, el durante y el después en la gestión de la dana y ahí es donde se tendrán que depurar todas las responsabilidades”, ha abundado Amills, que sí ha escuchado de boca de Mazón precisamente esa reflexión. “Creo que la palabra que ha empleado es que se dio la tormenta perfecta. Y falló todo pero el principal responsable es el presidente de la Generalitat”, ha subrayado.
Amills ha explicado a este diario que la Generalitat se puso en contacto con él a inicios de esta semana y el jueves concretó el encuentro, en el que el presidente de Sos desaparecidos acudirá a la sede del Gobierno autónomo, en el centro de Valencia, acompañado de su esposa y sin abogados u otras víctimas. El representante de los damnificados transmitirá al barón popular la necesidad de “llegar hasta el final” para desgranar las causas que desembocaron en la riada del 29-0. Y también reprochará a Mazón por qué ha tardado tanto en recibirles.
Se da la circunstancia de que Sos desaparecidos trata de personarse como acusación particular en la causa que instruye la jueza de Catarroja (Valencia) por la riada, la magistrada Nuria Ruiz Tobarra. Y pedirá la declaración como testigo de Mazón. Amills considera al dirigente “el principal responsable” de la catástrofe, según ha explicado en una entrevista en EL PAÍS. El también cofundador de Sos Desaparecidos ha criticado que en el Cecopi –el órgano de emergencias de la dana- no se levantarán actas o se retrasara de forma injustificada el envío de la alerta a móviles, piedra angular de la investigación. La jueza Ruiz Tobarra sostiene que si el mensaje hubiera llegado antes, se habrían salvado vidas.
Amills puso como condición a la Generalitat que el encuentro de hoy fuera público. A la cita asistirá también la vicepresidenta primera del Consell, Susana Camarero, mano derecha de Mazón que, en sus comparecencias públicas, trata de responsabilizar de la tragedia al Gobierno de Pedro Sánchez.
Desde las inundaciones, el president no ha mantenido encuentros oficiales con asociaciones de víctimas. La semana pasada, se citó de forma improvisada en el palacio de Manises, sede de la Generalitat, con tres damnificados de la dana. Uno de ellos, había ido varios días con una pancarta al edificio, para protestar por la muerte de su madre, de 84 años, en Catarroja (Valencia). El presidente pidió perdón y admitió que la alarma llegó tarde.
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